Impresiones 3D MJF y SLS – Comparación lado a lado

A primera vista, la relativamente reciente tecnología de impresión 3D Multi Jet Fusion (MJF) puede parecer un sustituto del sinterizado selectivo por láser (SLS), ya que ambos sirven para crear piezas a partir de nylon termoplástico, pero la MJF es más rápida, más precisa y crea piezas con propiedades mecánicas más uniformes.  Pero no descarte aún SLS, aún tiene algunas ventajas frente a su flamante rival. Todo depende de para qué necesite la pieza.

Crear piezas tridimensionales

Ambos procesos fabrican las piezas mediante un proceso de fusión térmica o sinterización, de partículas de polvo de polímero, capa por capa, y ambos utilizan polímeros termoplásticos que suelen ser de nilón. Se diferencian en que, mientras que SLS utiliza un láser para escanear y sinterizar cada sección transversal, con MJF la tinta se dispensa sobre el polvo como agente fusionante para favorecer la absorción de la luz infrarroja que fusiona las capas entintadas.

Ambos sistemas producen piezas duraderas para pruebas funcionales y para uso final.

Multi Jet Fusion parts (left) will typically have improved surface finishes and mechanical properties compared to SLS parts (right).

Multi Jet Fusion parts (left) will typically have improved surface finishes and mechanical properties compared to SLS parts (right).


¿En qué se diferencian?

El coste. Una diferencia importante es que con MJF el proceso es más rápido, por lo que los costes de fabricación tienden a ser más bajos.

El coste es un factor importante, pero no es el único; también hay que pensar en la microrresolución, el acabado de superficie, los materiales, los colores y las propiedades mecánicas.

Microrresolución. MJF permite producir detalles más pequeños, hasta los 0,5 mm.  En comparación, los detalles en SLS tienen un tamaño entre los 0,75 mm y 1 mm, dependiendo del material que utilice.  Lamentablemente, no es tan sencillo: a pesar de que MJF permite tener detalles más pequeños, SLS permite mayor precisión en los detalles pequeños.

Acabado de superficie. En teoría, MFJ tiene una ligera ventaja sobre el otro proceso, pero ambas tecnologías producen piezas con textura granulosa, así que en ambos casos deberá considerar un procesamiento posterior.

Materiales. El material principal en ambos casos es el nilón. Sin embargo, SLS le ofrece más opciones, como PA relleno de carbono, y PA relleno de vidrio. Ambos ejemplos poseen propiedades mecánicas adicionales.  Sin embargo, la selección de materiales no es algo que deba dar por sentado, ya que las cosas pueden cambiar muy rápido en el mundo de la impresión 3D. Hasta hace muy poco, SLS podía producir este tipo de piezas, mientras que MJF no, pero ahora también puede producir piezas con este excelente material con MFJ.

Color. En este caso, SLS es claramente la opción más ventajosa, ya que esta técnica permite teñir las piezas de casi cualquier color que desee. MFJ tiene más limitaciones, ya que el agente utilizado es negro, porque los materiales oscuros tienden a absorber mejor la radiación infrarroja.  Esto quiere decir que las piezas MJF tienen una apariencia de color gris claro, que su proveedor puede teñir de negro por motivos cosméticos, si es necesario.

Propiedades mecánicas. De nuevo, a primera vista podría parecer que MJF es la mejor opción, porque la manera en la que construye las piezas hace que estas tengan propiedades mecánicas más uniformes por toda su geometría. Si tiene características clave en varias superficies, es posible que MJF sea la mejor opción. 

Pero no se puede olvidar que SLS ofrece más materiales, todos ellos con propiedades mecánicas diferentes. Por esto, usted debería investigar un poco y decidir qué propiedades mecánicas son importantes para sus piezas.

Tamaño de la pieza.  Para esto, deberá consultar las dimensiones que puede proporcionar su proveedor. En general, SLS puede producir piezas más grandes. 

En Protolabs, el tamaño máximo para SLS es 676 mm x 367 mm x 564 mm.  En comparación, el tamaño máximo para las piezas MJF es de 284 mm x 380 mm x 380 mm y las dimensiones máximas recomendadas son de 200 mm x 200 mm x 200 mm para evitar deformaciones e imprecisiones dimensionales.

Cantidad de piezas que necesite. Si necesita producir más piezas, MJF es un proceso más rápido, que permite producir más piezas en un periodo de tiempo más corto y acortar los tiempos de entrega.

 

En última instancia, tanto SLS como MJF son excelentes métodos para producir piezas funcionales con dimensiones precisas, con la geometría que usted desee.  Su elección dependerá de sus necesidades en cuanto a piezas.

 

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